Querido Ángel,
Hoy es 2 de agosto y cumples años, encerrado en ese inmundo e inhumano
Campo de Concentración de la dictadura que es la Prisión 1580. Pretendieron
congelarte, aislarte, silenciarte. Nada han logrado. No solo porque
eres más fuerte moralmente que el tremendo aparato de Estado que ponen
a trabajar para controlar a un hombre cuyas únicas armas son sus
palabras, sus verdades gritadas a todo el mundo, si no porque, por más
hielo con el que intentan cubrir tu corazón, es tu corazón el que
derrite ese hielo. Cuanto más hacen por aplastarte, más te fortalecen.
Cuanto más intentan silenciarte, más resonancia internacional adquiere
tu voz. Ya deberían haber tomado nota de ello, pero ya lo sabemos: las
dictaduras son siempre así de obcecadas y estúpidas. Sigue leyendo