Estimado Christophe Deloire,
Secretario General de Reporteros sin Fronteras,
“Honor a quien honor merece”, decía nuestro José Martí, que se adelantó a mi madre, quien inculcó en mi educación la cultura del agradecimiento.
Muchos, a partir de mi encarcelamiento, se han mantenido a mi lado en esta travesía que dura más de un año; pero quien más se ha destacado ha sido Reporteros sin Fronteras (RSF), que desde el inicio, tras leer todas mis pruebas presentadas en el supuesto “juicio” que me efectuaron, y luego aumentadas en la Revisión, decidieron apoyarme sin cejar un ápice en mi defensa.
En una carta personal, donde también les agradecía su postura honesta y valiente, les describí el sentimiento que nos abraza cuando desde la más oscura celda, tras las rejas, abusados por los esbirros de la dictadura, nos llega una señal de aliento de la organización que usted lidera, reclamando al Presidente del Estado totalitario, que se ocupe de restituirnos los derechos arrebatados. En mi caso personal, me proporcionó esa fuerza extra, luego de dos semanas en el hueco y en plena huelga de hambre, que me hizo sentir feliz por lo que hago aunque me aconsejaron y rogaron que considerara la vida como lo primordial y nunca elija la inanición como vía de lucha.
A pesar del sufrimiento de estar privados de lo más valioso para el ser humano, la libertad, y de añorar la familia y el consumo libre del arte, nos sentimos merecedores de tal suerte, si ante nosotros persiste el estado sin derechos.
Quiero un país sin censura, y cuando eso ocurra, estaremos viviendo una nueva etapa política, social y cultural para la Cuba que necesitamos construir con el esfuerzo de todos. Hasta tanto, el abrazo agradecido a usted y a su equipo de trabajo, especialmente a la cálida y abnegada labor de Camille Soulier, y a Lucie Morillon, siempre atenta a lo que pasa en nuestro continente con el lamentable retroceso en materia de libertad de expresión y persecución a los profesionales de la información, particularmente su compromiso con los periodistas cubanos. La labor de todos ustedes es loable y fundamental para la búsqueda de las libertades personales y cívicas de los que humildemente deseamos aportar una luz de verdad desde el centro de la total oscuridad.
Ángel Santiesteban Prats
Prisión asentamiento de Lawton. Abril de 2014