Me he preparado para prescindir de mi “abogada”. Ella, como el resto de los juristas apegados al sistema, no pueden hacer nada que no le sea conveniente a la Fiscalía, que es la representante del Estado. La justicia en mi país no tiene las manos atadas, desde hace mucho tiempo se las cercenaron. La balanza de la equidad está soldada a una de sus inclinaciones. Sigue leyendo
Los intentos fallidos para construime en «agente» VI
Deja un comentario